lunes, 23 de noviembre de 2009

Nuestra autoestima y la mala suerte.

Con frecuencia, pensamos que una parte importante de nuestros problemas, pueden estar relacionados con la mala suerte.
Si no, cómo nos explicamos el hecho, de que existen personas que tienen buenas relaciones, les va bien en sus negocios, generalmente están contentas, etc., mientras que a otras les pasa todo lo contrario.

A pesar de que existen una gran cantidad de elementos, relacionados con el éxito y el fracaso, uno de los más importantes es el tipo de autoestima que tenemos.

Cuando tenemos una baja autoestima, lo que nos hace sentir inseguros, tendemos a evitar situaciones nuevas y cualquier tipo de problema, porque estamos convencidos de que no somos capaces de resolverlos, adecuadamente.

Somos indecisos, pero no por falta de conocimientos, sino porque tenemos miedo de cometer errores que confirmen, ante nosotros mismos y ante los demás, nuestra incapacidad.

Cuando no actuamos, difícilmente podemos lograr lo que deseamos y, si esto sucede continuamente, tendemos a culpar a la mala suerte.
Te recomiendo que leas el artículo ¿Baja autoestima o mala suerte?

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Temor a fracasar.

¿Te preocupa fracasar?
¿Dejas de hacer cosas, por el temor al fracaso?
¿Qué significa el fracaso, para ti?

Todos hemos fracasado a lo largo de la vida.
Sin embargo, cada persona puede ver el fracaso de una manera diferente.

Imagínate que empiezas un proyecto.
Trabajas en él, lo desarrollas, lo llevas a la práctica y al final, no obtienes los resultados que deseabas.
¿Pensarías que has fracasado?
La gran mayoría de la gente así lo consideraría.

Ahora piensa que tu proyecto en bajar 20 kg. y hacer ejercicio todos los días.
Te pones a dieta y empiezas a ir al gimnasio.
Al final, bajas 16 kg y sólo haces ejercicio 3 veces a la semana y allí te mantienes.
¿Consideras que fracasaste?
¿Te reconoces el mérito y disfrutas de los resultados?
¿Te desanimas, dejas de preocuparte por tu peso, abandonas el gimnasio y, muy probablemente, empiezas a recuperar el peso perdido y a abandonar el ejercicio?

El fracaso es muy subjetivo.
Algunas personas sólo se fijan en el resultado final y para evitar el fracaso, sólo se arriesgan a hacer algo nuevo, si están convencidas de que van a tener éxito.
Para otras, tan importante como el resultado, es lo que logran y aprenden durante el proceso, así como ser el capaces de buscar y actuar ante nuevas situaciones, deseos, expectativas, etc.
Estas personas avanzan por la vida obteniendo logros, desarrollándose, teniendo nuevas oportunidades y disfrutando de ellas y de sus éxitos.

Todo lo nuevo nos da la posibilidad de equivocarnos y hacerlo mal, hasta que se vuelve conocido y nos es fácil.
El temor al fracaso es algo que todos hemos vivido, el éxito está en actuar a pesar de dicho temor, aprender de todo lo que la situación y nuestra propia conducta nos puede enseñar y disfrutar de lo que sí logramos.
Cuando actuamos de esta manera, el temor al fracaso disminuye y las posibilidades de éxito aumentan considerablemente.

¿Cuál es tu actitud ante el posible fracaso?

Te recomiendo los siguientes artículos.

Miedo al fracaso.

lunes, 31 de agosto de 2009

Reprimir las emociones negativas.

¿Qué es lo que a ti te estresa?

Seguramente, cuando escuchas esta pregunta, te vienen a la mente toda una serie de personas o situaciones bastante fáciles de identificar, como por ejemplo, las presiones familiares, económicas o de trabajo, la falta de tiempo para hacer todo lo que tenemos pendiente, enfrentar situaciones en las que no nos sentimos seguros de cómo actuar, el ruido, etc.

Sin embargo, podemos vivir experiencias que nos estresan, sin darnos cuenta del alto nivel de estrés que nos están provocando y, por lo tanto, de lo mucho que nos afectan, tanto física como emocionalmente. Por ejemplo, cuando tratamos de reprimir nuestras emociones.

Existen toda una serie de emociones que consideramos negativas, como el coraje, miedo, depresión, celos, angustia, etc., que tendemos a tratar de reprimir, negándolas, ignorándolas y si es posible, tratando de no sentirlas.

¿El resultado?

Por un lado, dichas emociones no desaparecen. Se quedan a nivel preconsciente o inconsciente, listas para surgir con fuerza y con poco control de nuestra parte, ante cualquier oportunidad.

Por otro lado, para reprimir nuestras emociones, necesitamos una gran cantidad de energía y cerrarnos, lo más posible, en nuestra capacidad de sentir. Esto nos genera mucho estrés y un gran desgaste físico y emocional.

Pocas veces nos damos cuenta del gran esfuerzo que nuestra mente y cuerpo necesitan realizar para mantener suprimida alguna emoción. Sin embargo, dicha represión provoca en nuestro organismo molestias físicas, dolores, enfermedades y disminuye el control que tenemos sobre nuestra conducta en particular y sobre la vida en general.

Por eso es importante reconocer dichas emociones, para poder manejarlas y expresarlas adecuadamente.

Te recomiendo los siguientes artículos:

¿Para qué nos sirven las emociones "negativas"?
Cómo reconocer nuestros sentimientos.

lunes, 13 de julio de 2009

¿Como te tratan?

¿Cómo te trata la gente con la que te relacionas a nivel personal o íntimo?
¿Te critican constantemente?
¿Se enojan contigo por cualquier cosa o te amenazan con enojarse y romper la relación?
¿Tratan de evitar que veas a otras personas o que te dediques a lo que te gusta?
¿Se burlan de ti, de tus errores o de tus características?
¿Te avergüenzan delante de los demás?

Estas son algunas de las características del abuso emocional.
Lo triste es que muchas personas que sufren este tipo de abuso viven infelices, con una muy baja autoestima, aceptando culpas que no les pertenecen, sin darse cuenta, realmente, de lo que está sucediendo.

El abuso emocional es mucho más frecuente de lo que suponemos. Pero al no darnos cuenta de lo que sucede, al pensar que la otra persona nos “corrige” o critica “por nuestro bien” o sin mala intensión, etc. o por miedo a las posibles consecuencias, callamos y lo permitimos, volviéndonos cómplices de dicho abuso.

Ninguna relación basada en un abuso emocional puede ser una buena relación, ni puede dar nada positivo. Es por eso que, aunque sea difícil y doloroso, es importante enfrentar lo que está sucediendo, para lograr un cambio.

Puedes encontrar más información en: http://www.crecimiento-y-bienestar-emocional.com/abuso-emocional.html

lunes, 29 de junio de 2009

¿Por qué mentimos?

Según la definición del diccionario, mentir es decir algo que no es verdad, con la intención de engañar. Es una acción voluntaria.
Sin embargo, no siempre mentimos con palabras, también podemos hacerlo con nuestro lenguaje no verbal, como por ejemplo, dando la impresión de que algo nos gusta, cuando no es así.

Es difícil decidir, como con muchas otras cosas, qué tanto mentimos por un factor genético y qué tanto lo hacemos por aprendizaje.

La realidad es que, desde muy pequeños, aprendemos que cuando mentimos, obtenemos algo positivo. Por ejemplo: el bebe llora cuando tiene hambre o está molesto y la mamá lo carga y lo atiende.
Poco después, el bebé aprende a llorar para que la mamá le preste atención y lo cargue
¿Está mintiendo?
La mamá interpreta el llanto, como que el bebé está molesto, pero él no tiene la consciencia suficiente para mentir, como tal.
Sin embargo, poco a poco se empieza a dar cuenta de que puede hacer cosas que dan un mensaje equivocado a la mamá (una mentira), para obtener lo que desea o evitar ciertas consecuencias.

Generalmente mentimos para evitar una responsabilidad o una consecuencia negativa (castigo, regaño, rechazo, crítica, etc.), para dar una imagen mejor de nosotros mismos (esto sucede sobre todo cuando nos sentimos inseguros o tenemos una autoestima baja), porque nos da la sensación de que somos más inteligentes que los demás (y esto nos genera una sensación placentera), por desinformación (no sabemos de lo que se está hablando, pero no queremos reconocerlo), para causar un daño (diciéndo algo que sabemos le va a doler, a la persona que lo escucha o va a influir negativamente en su conducta), para ser el centro de atención, para no causarle un dolor o daño a alguien que queremos, etc.
También podemos mentirnos a nosotros mismos y a los demás, ante la necesidad de no querer ver la realidad, tratando de escapar de algo que nos lastima.

El principal problema es que una mentira conlleva a otra y ésta a otra más y así sucesivamente, se mantiene un círculo vicioso.
Como consecuencia, la persona que miente, pierde credibilidad, los demás dejan de confiar en ella y, con frecuencia, el mentiroso acaba mintiendo constantemente, aun cuando no es necesario e incluso, puede llegar a creerse sus propias mentiras. Esto ya se considera un problema patológico.

miércoles, 17 de junio de 2009

Sólo por hoy.

A pesar de que, a la mayoría de nosotros nos cuesta trabajo aceptarlo, la felicidad es una elección personal, aunque puede ser alcanzada, conscientemente, sólo cuando hacemos lo necesario para lograrlo.

A continuación, te presento algunos puntos que son importantes para desarrollar una nueva actitud ante la vida y que te pueden llevar a aprender a ser feliz.

Practícalos, pero existe una condición, sólo por hoy.

1) Vive en el presente.
Sólo por hoy, no pienses en el pasado, ni en el futuro.

2) No busques culpables, de las cosas que suceden.
Si tienen solución, soluciónalas. Si no la tienen y te están afectando, cambia tu manera de pensar al respecto o ve qué puedes aprender de ellas y qué beneficio puedes obtener.
Además recuerda que todo es pasajero.

3) Busca sólo lo positivo de las personas y las situaciones.
Solo por hoy, resuelve los problemas y los aspectos negativos que sí te afectan directamente, pero enfócate a buscar sólo lo positivo que existe en el mundo que te rodea y en ti mismo.

Mientras más los practiques, menos trabajo te va a costar, hasta que se vuelvan un hábito en ti.
Cada día que los practiques, será un día diferente, porque los resultados serán determinantes en tu estado de ánimo y en tu camino hacia la felicidad.
Pero acuérdate que el día que los practiques, debes de empezar, estando consciente de que es “sólo por hoy”.

Puedes encontrar más información al respecto en:
Cómo aprender a ser feliz.
Aprendiendo a ser feliz.

jueves, 4 de junio de 2009

El miedo a fracasar.

¿Cuáles son tus principales temores?
¿Le tienes miedo al fracaso?
¿Es posible evitarlo?

La realidad es que el fracaso es parte de nuestra vida y es inevitable, pero el tenerle miedo o no, es una elección personal.

¿Por qué?

Porque depende del significado que le demos a nuestros errores y al fracaso mismo.
Si lo vemos como algo negativo, si nuestra autoestima depende de él y nos calificamos en función del número de éxitos y fracasos que tenemos a lo largo del día, obviamente nos asusta la posibilidad de fracasar.

Pero si lo vemos como una experiencia que nos ayuda a aprender y a mejorar, como una simple etapa dentro de nuestro desarrollo y nuestro aprendizaje, como algo normal y natural, sin tomarlo como algo personal, no le vamos a temer.
El miedo depende de nuestra forma de pensar y nosotros elegimos nuestros pensamientos, por lo tanto, nosotros elegimos si queremos sentir temor o no.

Si aprendemos a detectar los pensamientos que provocan y mantienen nuestro miedo y aquellos que convierten al fracaso en algo amenazante y los cambiamos, se termina el miedo y el fracaso se convierte en nuestro aliado.

¿Qué significa el fracaso para ti?
¿Te da miedo fracasar?
¿Qué haces al respecto?
Comparte con nosotros tu opinión.

Puedes encontrar más información al respecto en:
Cómo vencer el temor a fracazar.
¿Divorciarse es fracasar.
Miedo al fracaso.

lunes, 27 de abril de 2009

La influenza y la preocupación.

Es imposible dejar de cuestionarnos, sobre cuál es la mejor actitud ante lo que está sucediendo con la epidemia de influenza.

Debemos cuidarnos, tomar las medidas necesarias, etc., es decir, preocuparnos, si consideramos a la preocupación como esa inquietud, intranquilidad e incluso cierto temor, que nos lleva a actuar para protegernos de alguna situación que puede causarnos un daño real, como en este caso.

Esta bien, pero preocuparnos…, ¿hasta donde?
¿Existe la preocupación excesiva, en un caso como este, cuando estamos hablando de vida o muerte?

Si.

La preocupación se vuelve excesiva en el momento en el que ya no podemos hacer nada al respecto, más que seguir preocupándonos.

La preocupación esta formada por los sentimientos antes mencionados y una serie de pensamientos que la alimentan y la mantienen o incrementan durante horas, días, meses o años, incluso cuando el hecho que la causó ya no existe.

La preocupación se vuele excesiva, en el momento en que ya no podemos hacer nada por prevenir o resolver la situación que la provocó.
Todo lo que pensemos y nos preocupemos a partir de ese instante, es preocupación excesiva e innecesaria, aunque esta situación puede variar si obtenemos nueva información que nos pueda llevar a actuar.

El secreto esta en la actuación adecuada.

La preocupación es útil, sólo cuando nos sirve para actuar adecuadamente, ya que cuando estamos muy preocupados y muy angustiados, o no actuamos o nuestras decisiones y nuestra conducta no son las más adecuadas.

Si deseas más información al respecto, consulta los siguientes artículos:
Cómo vencer las preocupaciones.

Acaba con las preocupaciones innecesarias.

No más preocupaciones innecesarias.

miércoles, 22 de abril de 2009

Unas vacaciones de la mente.

Con frecuencia cuando estamos estresados, hemos vivido una situación difícil o estamos enfrentando un problema, anhelamos unos días de descanso o la posibilidad de irnos de vacaciones.

Desafortunadamente, en los tiempos actuales, en las grandes ciudades, si tomáramos vacaciones cada vez que las necesitamos, no duraríamos en ningún trabajo, porque nadie nos permitiría faltar tanto.

¿Cuál es entonces la alternativa?
¿Descansar los fines de semana?

Pero son los días que tenemos que ocuparnos de los hijos, la pareja, la casa y/o los padres.
Tenemos compromisos sociales que tenemos o queremos cumplir y obligaciones o necesidades personales que queremos satisfacer.

¿Entonces cuál es la opción?

Si mentalmente estamos descansados, el cansancio físico nos afecta mucho menos y es mucho más fácil recuperarnos durmiendo mejor y relajándonos varias veces al día.

Pero, ¿qué significa tomar vacaciones mentales?
Aprender a tener espacios en los que no nos preocupamos, no nos estresamos y disfrutamos plenamente, estando desconectados de los problemas.

Posiblemente estás pensando que es difícil o imposible hacerlo, cuando estamos agobiados por los problemas y “no podemos dejar de pensar en ellos” y dejar de busca una solución.

Si eso es lo que crees, tú, como millones de personas que lo creen, están equivocados.
Nosotros elegimos en que pensar y hacia donde queremos dirigir nuestra atención.

Busca actividades que realmente te gusten y te distraigan, aprende a relajarte, a respirar correctamente y a manejar tus preocupaciones en los siguientes artículos:

Cómo vencer las preocupaciones.

Cómo manejar la angustia.

Respira correctamente.

Relajación y salud.

Optimismo o pesimismo, una actitud ante la vida.

Cómo aprender a ser feliz.

Si tienes alguna sugerencia que te gustaría compartir con nosotros, me encantaría conocerla.

lunes, 20 de abril de 2009

El abuso y la autoestima.

¿Han abusado de ti, física, emocional o psicológicamente?
¿Has abusado tú, de alguien?

El abuso se da con mucha mayor frecuencia de lo que se reconoce.
En ocasiones, la gente calla, por vergüenza, culpa o temor.

Pero muchas veces callan, porque no consideran que lo que hacen o lo que les hacen, sea abuso.

Esta misma ignorancia la llevamos más lejos todavía, hasta el comportamiento que tenemos con nosotros mismos.
Hay muchas maneras de maltratarnos o abusar de nosotros mismos.

Podemos hacerlo dañándonos abiertamente, consumiendo drogas, alcohol en exceso, teniendo relaciones sexuales sin protección, alimentándonos con comida chatarra, permitiendo que se nos traten sin respeto, consideración, etc. Pueden incluso tratarnos como objetos inservibles, ignorarnos como si no existiéramos,etc. y no depende de nuestro sexo.

¿Y por qué lo hacemos o lo permitimos?

Aparentemente puede haber muchos motivos, pero la raíz de todo, está en una muy baja autoestima.

No podemos pedirle a nadie que nos dé un lugar que nosotros no nos damos.
No podemos esperar respeto, si no nos respetamos.

Pero nunca es tarde.
No importa la edad que tengas, ni lo que hayas vivido.
Siempre puedes aprender a vivir mejor.
Siempre puedes trabajar para mejorar tu autoestima.
Existe mucho material al respecto.

Mejorar la autoestima no se logra de un día para otro, pero cada paso que des, vale la pena.

Puedes encontrar más información sobre autoestima en: Artículos de autoestima.

martes, 7 de abril de 2009

Abuso emocional.

Abuso emocional.

La mayor parte de las veces, cuando hablamos del abuso físico e incluso del abuso sexual, no tenemos problemas para identificarlo.
Tenemos claras cuales son las conductas del abusador.
Sin embargo, no siempre sucede así cuando se trata del abuso psicológico o emocional.

¿Por qué?

Porque la gente asocia abuso con violencia, agresión abierta, expresiones claras de enojo, etc. y no siempre es así.

Hablamos de abuso emocional, siempre que nos referimos a cualquier conducta verbal o no verbal, abierta o encubierta (disimulada), que tiene un efecto negativo sobre las emociones, pensamientos, autoestima, etc., de otra persona.

Este tipo de abuso se da en cualquier tipo de relaciones, en donde una de las personas tiene cierto poder sobre la otra, independientemente de la edad y sexo de los participantes.
Podemos verlo en cualquier tipo de parejas, padres e hijos, amigos, relaciones de trabajo, con los ancianos, etc.

El poder, no necesariamente se da porque la relación lo establece. Puede haber abuso emocional de una adolescente hacia su padre, en la relación de pareja el hombre hacia la mujer o viceversa, etc.

Algunas de las formas más comunes de abuso emocional son:
Ignorar la presencia de una persona, actuar como si no existiera o como si sus opiniones y comportamiento no tuvieran ningún valor, decírselo, insultarla, ponerla en ridículo delante de otras personas, burlarse de ella, amenazarla , destruir sus pertenencias, evitar que se relacione con otras personas, ignorando sus necesidades, etc.

En una relación de abuso emocional, tanto el abusador como la persona de quién abusan, casi siempre van a negar la raíz de de su comportamiento y van a encontrar una justificación, con frecuencia, aparentemente lógica, que explica y mantiene sus conductas.

El abuso emocional termina, sólo cuando la persona de quién abusan, decide y actúa para evitarlo.

Si están abusando de ti o tienes alguna duda al respecto, busca información o ayuda, no dejes pasar más tiempo.

Te recomiendo leer el artículo ¿Qué sabes del abuso emocional?

miércoles, 1 de abril de 2009

La risa y nuestros problemas.

Vivimos momentos difíciles.

La preocupación, el estrés, las prisas, etc., parecen ser las principales características de nuestras actividades diarias.
Cada día parecen ser más las relaciones en general y las parejas en particular, que cuando están juntas, en lugar de compartir momentos de risas y amor, comparten tensión, pláticas desagradables, agresión o en el mejor de los casos silencio o indiferencia.

Una gran parte de nuestras conversaciones, están basadas en temas relacionados con problemas, ya sean personales, sociales, políticos, económicos, etc., pero finalmente temas que despiertan o alimentan nuestra angustia, temor sobre el futuro que nos espera, malestar sobre la situación que vivimos, etc.
Este tipo de conversaciones y de actitudes nos enferman.

Si.
Literalmente nos enferma física y emocionalmente.

Porque cuando vivimos constantemente las emociones antes mencionadas, nuestro organismo altera su funcionamiento, trabaja en exceso, pierde su equilibrio y nos da, como resultado, las diferentes enfermedades psicosomáticas y molestias como, dolores de cabeza, cuello y espalda, presión arterial elevada, problemas estomacales, etc.

¿Qué podemos hacer al respecto?
Reír y jugar.

Estas son dos de las mejores medicinas que tenemos disponibles, son innatas y gratis.

Por lo tanto, te invito a usarlas varias veces al día, siempre que puedas.
Si ya se te olvidó, reír desde el estómago, con todo el cuerpo, tal y como lo hacen los niños, te invito a despertar a tu niño interno.

Todos podemos hacerlo.

Al hacerlo, tus problemas no desaparecerán mágicamente, pero tendrás una mejor actitud y salud, con lo cual podrás enfrentarlos de una manera más adecuada y obtener mejores resultados.

Te invito a consultar los artículos:
Cómo aprender a ser feliz.

Aprendiendo a ser feliz.

Optimismo o pesimismo.

¿Sabes divertirte?

Ríe y vive mejor.

martes, 31 de marzo de 2009

El miedo y tú.

¿Qué papel juega el miedo en tu vida?

Todos hemos sentido miedo en diferentes ocasiones, a lo largo de nuestra vida y generalmente lo consideramos como una emoción negativa.
De hecho, incluso nos avergonzamos de sentirlo y con frecuencia lo negamos.

Sin embargo, el miedo es una emoción que forma parte de nuestro instinto de supervivencia, ya que, ante una situación que amenaza nuestra vida, produce una activación instantánea en nuestro organismo, que nos da la fuerza y rapidez necesaria para huir, defendernos, atacar o protegernos de dicha amenaza.

Cuando el miedo surge ante un peligro real, es proporcional a éste, y termina cuando el peligro pasa, hablamos de un miedo positivo y adaptativo o adecuado.
Pero cuando vivimos dicha emoción ante una amenaza o peligro imaginario o exagerado por nuestra forma de pensar, no hay una proporción ni una relación lógica entre ambos elementos o el miedo persiste, cuando el peligro ya pasó o ni siquiera se ha presentado, no sólo nos enfrentamos ante una emoción negativa, sino que vivimos consecuencias que nos afectan física, psicológica, emocional y conductualmente.

Por eso es tan importante aprender a detectar nuestras emociones y poder determinar su origen y magnitud, para elegir la conducta y actitud que debemos tener ante ellas.

¿Y tú, qué papel juega el miedo en tu vida?
¿Cómo lo manejas?
¿O te maneja él a ti?
¿Qué crees que puedes hacer al respecto?

Te recomiendo los siguientes artículos:
Cómo reconocer nuestros sentimientos.
¿Para que sirven las emociones "negativas"?
El origen de las emociones.
Cómo controlar los sentimientos.

lunes, 16 de febrero de 2009

¿Quién soy?

Si decidieras irte de vacaciones la próxima semana ¿qué harías?

Probablemente pensarías qué tipo de vacaciones deseas, para escoger el lugar, con cuánto dinero cuentas, para determinar el tipo de transporte que puedes utilizar y el nivel de hoteles que puedes reservar, cuál es el clima de ese lugar, para decidir qué ropa te vas a llevar, etc.

Generalmente, no nos vamos de viaje sin ningún preparativo, con la idea de que "lo que vaya saliendo, lo vamos resolviendo". Sin embargo, con mucha frecuencia, así es como vivimos nuestra vida.

Sabemos que tenemos que trabajar, atender nuestras responsabilidades, llevar a cabo ciertas actividades sociales, familiares, de descanso, etc. y seguir con nuestra rutina. Hasta que un día nos damos cuenta, en el mejor de los casos, que estamos descontentos y constantemente de mal humor o amargados y en el peor de los casos, deprimidos.

¿Qué sucede? Que nunca nos hemos planteado firme y claramente, de manera específica, qué queremos lograr y cómo podemos lograrlo. Nos dejamos arrastrar por la vida, a veces por comodidad, pero muchas veces porque ni siquiera sabemos, bien a bien, quienes somos y qué queremos.

Crecemos en un medio social en donde nos enseñan a ser "como debe de ser un buen niño", primero y después "como debe de ser una persona, que desea ser aceptada por los demás" y en ese deseo de cumplir con las reglas, que establece la sociedad y de satisfacer nuestra necesidad de ser aceptados y de pertenecer a un grupo, vamos negando e ignorando todas nuestras características, valores y necesidades, que no concuerdan con lo que la sociedad en la que vivimos nos exige.

Quizás este es el momento de hacer un alto en el camino y preguntarte ¿quién soy?, ¿qué quiero?, ¿qué necesito para ser feliz? ¿qué puedo hacer para tener una vida plena?
Nunca es tarde, si empiezas hoy, puedes vivir mucho mejor, el resto de tu vida.

Encuentra más información en:
Autoimagen, nuestro espejo interno.

martes, 13 de enero de 2009

El miedo al éxito.

¿Si te preguntara si deseas tener éxito en la vida, qué me responderías?

¿Te extraña la pregunta?

Seguramente piensas, que todas las personas contestarían que sí lo desean.
Y tal ves eso es lo que afirmaría la mayor parte de la gente.
Sin embargo, al observar su conducta, podríamos ver que no es así, que de una forma u otra, se autosabotean constantemente.
Un gran número de personas le tienen miedo al éxito, es decir, que ante la posibilidad de tener éxito en algún área de su vida, actúa, consciente o inconscientemente, para arruinar la posibilidad de triunfar.
¿Cómo?
Puede ser posponiendo las acciones que deben de llevar a cabo, “olvidándose” de algunas cosas, empezando otros proyectos y no terminando ninguno por falta de tiempo, no encontrando el momento adecuado para empezar, etc.
Cuando tenemos éxito, nuestra vida cambia, porque nosotros cambiamos. Cambian nuestra manera de pensar, de percibirnos a nosotros mismos y a los demás.

Esto puede generar nuevas expectativas que no sabemos si podremos cumplir, cambios en las relaciones con nuestros amigos, etc. y como los cambios con frecuencia nos angustian, elegimos autosabotearnos inconscientemente, consolarnos pensando que lo intentamos y seguir adelante tal y como estamos.

Pero al actuar así, estamos cometiendo un error.
Los cambios siempre se dan, teniendo éxito o no.
Por lo tanto, es mejor enfrentarse a ellos cuando son causados porque nosotros los provocamos con nuestro éxito y cuando aprendemos a disfrutar de ellos.

Encuentra más información en:
Miedo al éxito

Supera el autosabotaje.

lunes, 5 de enero de 2009

La crisis y el año nuevo.

Cada vez que empieza un nuevo año, empezamos con nuevos propósitos que esperamos poder cumplir. Sin embargo, al paso de los días, dichos propósitos se van olvidando y caemos en la rutina de todos los días.
Este año, para muchos, empieza con las palabras crisis, problemas y ¡a ver como nos va!

Si empezamos con una actitud negativa, hay más posibilidades de que nos vaya mal.
¿Por qué?
Porque cuando nuestra visión es pesimista, ponemos atención a lo negativo e ignoramos los aspectos positivos.
Además no buscamos ni aprovechamos las oportunidades, porque estamos convencidos de que no vale la pena el esfuerzo, ya que, al fin y al cabo, nos va a ir mal.

Es cierto que estamos viviendo una crisis, pero también es cierto que no a todas las personas les va mal en la crisis y, además, a mucha gente que sí le va mal, cuando pasa la crisis se recupera emocionalmente y económicamente y sigue adelante.
La crisis nos afecta hasta cierto punto. El mayor daño nos lo causamos nosotros mismos, con nuestra actitud y nuestros pensamientos.
Nadie puede limitarnos y devaluarnos más, que nosotros mismos.
Y son nuestros pensamientos los que mantienen vivas, durante meses o años, las emociones que nos lastiman y nos amargan.

Este año nuevo, hazte un regalo, aunque sea atrasado:
Haz tuya la frase de Víctor Frankl: “La única cosa que nunca puedes quitarme es la manera que yo escojo para responder a lo que tú me haces. La última de nuestras libertades es la de escoger nuestra actitud, ante cualquier circunstancia” y enfrenta la crisis con valor, optimismo, perseverancia ante los problemas y confianza en ti mismo y al final, los resultados serán positivos.

Puedes obtener más información en:
Optimismo o pesimismo, una actitud ante la vida.

El origen de las emociones.

Incertidumbre, cambio y estrés.

Como enfrentar una crisis.