miércoles, 21 de mayo de 2014

¿Qué es la felicidad?

Mi bienestar: ¿Qué necesitas para ser feliz?

¿Qué necesitas para ser feliz?

¿Cuántas veces te has preguntado, qué necesitas para vivir mejor, para ser feliz?




Si dividiéramos a las personas en dos grandes grupos, de acuerdo a la satisfacción que sienten respecto a los logros obtenidos y a su bienestar en general, podríamos hablar de aquellas que logran sus metas y están satisfechas con lo que tienen y aquellas que casi nunca lo están.

No es raro escuchar a las que se encuentran en este último grupo buscar justificaciones, como por ejemplo::
"Si sólo tuviera una pareja, un hijo, más dinero, una profesión, un mejor trabajo, una casa propia, mejor salud, si pudiera resolver este problema, etc., etc., entonces sería feliz.

Entre los diferentes motivos que explican su constante malestar, encontramos que:

1.- Nunca logran lo que realmente dicen que desean.
2.- Logran lo que desean, pero sin embargo no les da la felicidad que esperan sentir.

 En el primer caso, lo que sucede es que:
a) No se esfuerzan lo suficiente para alcanzar sus metas, ya sea por una actitud negativa o de víctima, una baja autoestima, autosabotaje, poca motivación, metas no planeadas o planteadas equivocadamente, falta de estrategia o de las herramientas necesarias, etc.

b) Se plantean objetivos inalcanzables o en cuanto se acercan a ellos inmediatamente se plantean otros aún más difíciles.

En el segundo caso colocan su bienestar exclusivamente en el exterior olvidándose de su parte interna, de su vida espiritual, sus necesidades emocionales, el sentido y significado de su vida, etc. y no se dan cuenta de que el problema es el gran vacío que puede existir dentro de ellos. 
Cuando esto es lo que sucede, por mucho que logren en el exterior, nunca va a ser suficiente para que sean realmente felices.

Y tú ¿te has dado cuenta a qué grupo perteneces?
¿Te has percatado cuáles son tus valores y dónde se encuentra la fuente de tu bienestar? 

Si te encuentras en el primer grupo, en el que está satisfecho, disfruta de tu capacidad para apreciar lo bello y lo bueno que existe a nuestro alrededor y de luchar por aquello que deseas y/o necesitas.

Si te encuentras en el segundo grupo no te sientas mal, aprovecha la oportunidad de recapacitar y lograr el cambio que necesitas para vivir mejor.